El truco final

No sé cómo comenzar esta pequeña revisión sobre una de las películas que más me ha marcado desde que me gusta y valoro el cine como se merece. No podía ser de la mano de otro director, Christopher Nolan, el tener la oportunidad de ver una película tan increíble cómo esta, en la que la temática es interesantísima y la trama está a mismo nivel. El mundo de la magia clásica, otra de mis aficiones que practico con mucho cariño y pasión, ilustrado en 130 minutos con una historia tan bonita e intrigante como es el proceso creativo de dos magos de época, Robert Angier y Alfred Borden, que luchan entre ellos mismos para lograr éxito y prestigio. Damas y caballeros, comienza el espectáculo.

El truco final, o también conocido como El Prestigio, es una película de ciencia ficción y suspenso estrenada en 2006 dirigida por el ya mencionado Christopher Nolan, basada en el libro homónimo escrito por Christopher Priest. Estuvo nominada a dos Óscars de la academia, fotografía y dirección artística. Está protagonizada por los magníficos Hugh Jackman y Christian Bale, aunque el reparto no se queda muy atrás, contando con actores como Michael Caine, Scarlet Johansson. La trama de la película nos cuenta la obsesión de Robert Angier (Hugh Jackman), un mago clásico muy respetado, ostentoso y sofisticado, con uno de los efectos de su rival más competente dentro del mundo de la magia, Alfred Borden (Christian Bale), más rudo y purista. En un comienzo son compañeros de "profesión" que se admiran mutuamente. Pero Angier, con el fin de descubrir el secreto del truco de Borden, hará todo lo posible, hasta llegar al punto de que su vida cambiará totalmente para lograrlo.

La película comienza en el Londres del siglo XIX con un mago llamado John Cutter (Michael Caine), el diseñador de ilusiones del mago Angier, realizando la ilusión del pájaro que desaparece a una niña, mientras le explica que todo truco de magia tiene tres partes; La Promesa, dónde se le presenta al público un objeto ordinario; El Giro, dónde el objeto se convierte en algo extraordinario; y El Prestigio, dónde el objeto original es traído de vuelta. Como mago, estoy muy de acuerdo con esta estructura, aunque sólo es aplicable a la magia de escena. Bien, ahora que sabemos esto, ¿en qué reside la genialidad de esta película? Muy sencillo. Todo el largometraje presenta la estructura que acabamos de escuchar, es decir, la propia película es un gran acto de magia. Recuerdo cuándo vi el final de la película, mi cara de asombro era exactamente la misma cómo si me hubiesen hecho un gran efecto de magia. Y es realmente la estructura de la película lo que me fascina, es exactamente igual si la comparamos a un acto de ilusionismo. Al principio te presentan a los personajes y la situación de rivalidad entre los dos magos, conforme avanza la puesta en escena es espectacular y realmente no sabes cómo va concluir la cinta, la expectación que te crea es muy parecida a lo que sientes cuándo ves magia, y el final... Con el final se te queda un rostro en el que te sientes de todo menos inteligente. Tu primera reacción es, "Christopher, ¿puedes repetirmelo?" No sabes si el director de la película es un ilusionista o un director de cine.

La rivalidad entre los magos llega a ser tal que Robert contacta con Nikola Tesla para sacar provecho de los nuevos e increíbles poderes de la electricidad, y de la brillantez de este científico, para aplicar todo esto en el mundo de la magia y ser el mago más respetado. Esta puede ser la parte de la película con más relación a la ciencia ficción, y para mi opinión está muy bien implementada y ayuda a lograr una película mucho más completa y sorprendente. La película analiza un mundo fascinante en el que se exploran los más lejanos y oscuros límites de la fe, la confianza y lo imposible. Recomiendo la película a todos aquellos que le guste un buen thriller, el mundo de la magia, y el "dejarse llevar" por una historia fascinante. Yo he visto El Prestigio, ¿y tú?

Valoración: 9.4/10